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Sobre el autor

Asesor en tecnologías de la información e innovación. Dirigió proyectos en Europa, Canadá, EEUU, Israel, India, Rusia y América Latina. A partir de 2007 ha trabajado principalmente en Políticas Públicas en Uruguay. Integra el Directorio de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y el equipo del Plan Ceibal. Dice que es ex - ingeniero pero nadie le cree.

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Sistema Nacional de Competitividad

20.May.2015

Pertinencia

¿La competitividad es un tema de alta importancia que debe ser priorizado por el Gobierno Nacional? La respuesta es, claramente, SÍ.

 Tenemos problemas de competitividad, estos problemas tienen muchas dimensiones y no se solucionan manipulando el tipo de cambio.

¿Es necesario conformar un Sistema Nacional de Competitividad (SNC)? Vale decir: ¿es necesario coordinar las acciones referidas a la competitividad de los Ministerios, de la Agencia Nacional de Desarrollo Económico, la ANII, Uruguay XXI, el INEFOP, el Instituto Nacional del Cooperativismo, la CND, el Sistema Nacional de Respuesta al Cambio Climático, el INIA, el LATU, el Instituto Nacional de Calidad?.

La respuesta es, claramente, SÍ. Estos organismos deben operar en forma coordinada y probablemente también sea necesaria la coordinación con otros en temas puntuales. No es razonable duplicar esfuerzos en algunos temas y descuidar otros debido a que "probablemente otra agencia esté a cargo".

Alcance

¿El SNC de competitividad debe encargarse de las políticas en Ciencia y Tecnología?

La respuesta es, claramente, NO. El SNC debe proponer políticas y estrategias referidas a la competitividad. Esto incluye temas de desarrollo y de inserción internacional. También debe coordinar las instituciones optimizando el uso de recursos y debe realizar el seguimiento y la evaluación.

¿El SNC debe proponer políticas y estrategias referidas a la Innovación? Vale decir: ¿la ANII debe formar parte del SNC?

La respuesta es, claramente, SÍ. La innovación es un componente fundamental de la competitividad. Las empresas, los gobiernos, los organismos internacionales, las escuelas de negocios y las escuelas de ingeniería, todos coinciden en señalar que la innovación juega un rol fundamental en el desarrollo.

Está claro que la "Innovación" es una temática más amplia que la competitividad, así como la "Investigación agropecuaria" también es más amplia que la competitividad; pero "participar en un Sistema" no quiere decir "estar subordinado". La ANII y el INIA deben participar en el SNC, deben coordinar sus planes, acciones e instrumentos buscando optimizar recursos y aprovechar sinergias. Imaginemos que cada una de las instituciones con competencia en temas de la competitividad se plantan en la posición: "mi área de trabajo tiene relación con la competitividad, pero es más amplia, por lo tanto no acepto planteos reduccionistas, y por lo tanto me niego a participar en el SNC". Si aceptamos esta línea argumental, entonces será imposible crear el SNC y seguiremos perdiendo oportunidades de optimización, de aprendizajes cruzados, de sinergias. En definitiva: de desarrollo.

La gobernanza de la ANII

La ANII tiene un directorio de siete integrantes, todos ellos son honorarios; sin embargo, la ANII es una agencia ejecutora. Hasta el momento ni siquiera está facultada para asesorar al Poder Ejecutivo en lo concerniente a políticas públicas.

La propuesta de ley apunta a dos objetivos:

• Mejorar el proceso de toma de decisiones, con un directorio de tres miembros rentados (obviamente nombrados por el Poder Ejecutivo). Esta conformación recoge la experiencia de otras instituciones.
• Habilitar a la ANII a asesorar al Poder Ejecutivo en políticas públicas. El objetivo de este punto es capitalizar la experiencia adquirida por la Agencia. Es altamente deseable que las Agencias tengan la facultad de proponer políticas en las áreas de su competencia. Esto no quiere decir que las agencias definan las políticas, la fijación de las políticas es potestad del Poder Ejecutivo.

La investigación, la ciencia y la tecnología

Si la ANII participa en el SNC, si además el SNC no tiene competencia en los temas de CyT, entonces, ¿quién se encarga de las políticas de CyT?

Empecemos por preguntarnos: ¿quién se encarga hoy, sin nueva ley, sin SNC?

No está muy claro: está la Dirección de Innovación, Ciencia y Tecnología; los invito a visitar su sitio institucional (http://mec.gub.uy/dicyt). Está el Consejo Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología, sus cometidos están en: http://goo.gl/HtLe9j. Pero el tema no está resuelto.

Existen también muchas instituciones atípicas como el PEDECIBA (http://www.pedeciba.edu.uy/sobre-pedeciba.php), que funciona desde 1986 pero continúa siendo un convenio entre el MEC y la Udelar. En este caso hay consenso amplio en la importancia de fortalecerlo institucionalmente, pero entre las instituciones relacionadas con la CyT también hay funciones duplicadas y oportunidades de sinergias desaprovechadas.

Hoy tenemos un problema institucional referido a políticas de CyT (tal como lo ha planteado la Academia Nacional de Ciencias del Uruguay). El proyecto de ley que crea el SNC no lo va a resolver. El proyecto de ley tampoco pretende resolver ese problema, ¡Pretende mejorar la competitividad!
Avancemos

El SNC es necesario, es una buena idea, es una herramienta para lograr un gobierno más eficiente. Al mismo tiempo -en paralelo- es necesario trabajar mucho para mejorar la institucionalidad en las áreas de Ciencia y Tecnología.

Por otra parte el proyecto de ley (como todo en esta vida) se puede mejorar. Ya se han planteado propuestas como:

1. Incorporar al MEC al Gabinete Ministerial de Competitividad: no con afán reduccionista, sino enriqueciendo la conversación con la visión de la Educación.

2. Eliminar las menciones a la Ciencia y la Tecnología del proyecto de ley.

3. Incorporar una mención expresa al problema de la institucionalidad en CyT, encomendando al Poder Ejecutivo a realizar un reordenamiento institucional y de competencias de los organismos del Estado en el área de Ciencia y Tecnología. El resultado de este punto naturalmente deberá coordinar y articular -sin ningún espíritu reduccionista ni en una dirección ni en la otra- con el SNC.



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