El golero de Nacional, Jorge Bava, le echa la culpa a la prensa por haber dado favorito a Peñarol en el pasado clásico. El ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, le echa la culpa a la prensa por tergiversar y mentir sobre su gestión. El presidente Mujica la echa la culpa a la prensa por sobreexponer a la consideración pública el affaire Pluna, mientras que la oposición le echa la culpa a la prensa por la sobreexposición del mandatario y sus ministros.
Da la impresión de que, "la prensa" está llena de intereses personales, procedimientos oscuros y opacos objetivos políticos y económicos, a diferencia de lo que ocurre en el fútbol, el gobierno y la oposición, ámbitos en los que seguramente impere la abnegación, el desinterés y el tratamiento ecuánime de los hechos.
Estos jíbaros connacionales soslayan una verdad inocultable para todo el que quiera hacer algún comentario sensato, ya sea encomiástico o denigratorio, sobre el punto: "los medios" no existen. Detrás de las críticas que pretenden juzgar a "los medios" o "los periodistas" se esconde el huevo de la serpiente de la discriminación. En efecto, no hay más razones para creer en la maldad o bondad de "los medios" de las que había para perseguir a "los judíos", "los infieles", "los cristianos", "los negros" o "los comunistas" por el hecho de serlo.
Cuando la justicia procesó al alcalde frenteamplista de Atlántida por apropiación indebida, a un ex presidente colorado de OSE por fraude o a un ex presidente nacionalista del Banco de Seguros por abuso de funciones, ¿qué habrían pensado los que hoy acusan a "los medios" si la responsabilidad por tales inconductas cayeran genéricamente sobre "los políticos", o peor aún, de "la política"? ¿No fue la existencia de "políticos corruptos" la excusa pergeñada por los golpistas para inclinar la balanza de la opinión pública a su favor en 1973?
Cualquier actor público medianamente responsable, debería evitar referirse a otro en términos que los exponga al odio o al desprecio colectivo a un grupo de ciudadanos por su condición profesional. Especialmente si lo que media es la difusión de una noticia o una opinión equivocada o negativa, lo que se debería hacer es identificar de quién se está hablando y cuál es el caso que se le reprocha.
Hay medios que politizan sus contenidos, periodistas que ocultan o retuercen la información según les convengan. Conductas similares pueden observarse en cada una de las actividades humanas. Pero eso no alcanza para justificar el exabrupto de la generalización, del mismo modo que haber encontrado un judío usurero en el Berlín de la kristallnacht o un cristiano iraquí colaboracionista de Hussein no justifica su exterminio ni el de sus comunidades.
Al ser "los medios", "los políticos" y "los futbolistas" escenarios con voces múltiples y contradictorias, es imposible generalizar sin sembrar el prejuicio, ya sea que se los señale como héroes o mentirosos. En este último caso, es probable que la acusación esconda cierta aversión a la crítica, o lo que es peor, la intención no confesada de acallarla.
Parece ser que esta profesión queda por fuera de cualquier análisis externo (cuestión que GS defendía a capa y espada un par de notas atrás).
¿Es que hay que aceptar sin chistar lo que pueda publicar un periodista o todo un medio periodístico? ¿Es que son de manteca y se pueden derretir por el calor de una respuesta?
Vamos, si un periodista decide publicar algo tiene que estar preparado para que alguien que no le guste lo que publica se lo retruque... y suerte en pila, los que observamos de afuera veremos quien estaba más cerca de la verdad.
La prensa critica siempre procederes, desde políticos a deportivos pero la prensa... ¿no se puede tocar? ¿compraron la verdad y la tienen atada en el fonde de la casa? "Araña quien te arañó, otra araña como vos" decía el tango.
o ammarrete.
Y victimizo al cristianismo, osea fueron victimas en las cruzadas y no victimarios, fueron victimas en " descubrimiento de América junto a los judíos y los victimarios fueron los indígenas.
Cada vez es más frecuente ver este verbo o su correspondiente sustantivo jibarización en los medios de comunicación, como en «El presidente defenderá la jibarización del mastodóntico sector público» o «Los empleados han visto como su sueldo se ha jibarizado». Aunque el Diccionario académico no registra todavía esta voz, sí la recoge el Diccionario del español actual (de Seco, Andrés y Ramos) con la definición de ‘reducir el tamaño de algo’.
Ocasionalmente se usa la forma jivarizar, a partir de jívaro, una variante ortográfica con cierto uso del nombre del pueblo, aunque no recogida en el Diccionario académico, que solo da jíbaro.
("http://www.fundeu.es/recomendaciones-J-jibarizar-un-verbo-adecuado-1486.html)
Salio con el victimismo de los judios de los cristianos.
Se olvido de los perseguidos de hoy en día... los árabes.
Enserio que quiso decir cuando nombro a los Jibaros¿?
Le salto el racista.
Con su criterio si los Jibaros son salvajes, los judios son usureros y los cristianos( los jibaros son bebe de pechos comparados con cristianos y judíos... la conquista de America, lo que esta pasando ahora en Medio oriente si quiere nombre a los arabes, pero no meta a los Jibaros y no victimize a los judíos y cristianos, que como que no.
Estoy seguro que los palestinos darían la mitad de su país con tal de convivir con Jibaros y no con judíos.
SOTELO UD OPINANDO DE FUTBOL¿?
Mejor no sea fariseo( ya que habla de judíos)... y mire la viga en el ojo propio y no la paja en el ajeno.
Nunca pensé que a una persona culta e inteligente como aparenta ser el Sr. Sotelo, hubiera que explicarle algunos conceptos tan básicos y elementales como si se tratara de un escolar con dificultades de aprendizaje.
Sotelo plantea la inconveniencia de la generalización y acusa a quienes razonan de esa forma de ser discriminadores, racistas, fascistas, de exponer a otros al odio y al desprecio, y de ser generadores de todos los males conocidos y por conocer en la tierra. “Es una forma facilonga y peligrosa de analizar fenómenos complejos y contradictorios, que suele terminar en tragedia” dice el periodista. O sea, el Sr. Sotelo pretende privar a la humanidad de una de las formas de conocimiento más potentes de la mente humana. Negar la validez de la generalización como una forma correcta de argumentación lógica, es totalmente absurdo. La generalización -el paradigma de los argumentos inductivos- es nuestra principal herramienta intelectual, es el soporte de casi todos los demás razonamientos, la experiencia hecha razón. Generalizar es atribuir a un grupo de cosas del mismo género algo que sabemos de algunos de sus individuos. Prescindimos de excepciones y detalles particulares. Nos referimos a lo común, lo habitual, lo más frecuente, lo que ocurre en casi todos o en la mayor parte de los casos: “Los chinos son bajitos”, “los días más calurosos son los de enero”
“Las mujeres, los eclesiásticos y los judíos se abstienen generalmente de beber” KANT.
Es absurdo refutar una generalización presuntiva alegando sus excepciones. Quien hace esto incurre en una falacia casuística, (Eso no es cierto, yo conozco un cura que es flor de borrachín. No, yo conozco un chino de 2 metros) Mientras la mayor parte de los casos cumplan la regla, la generalización es correcta, tanto si tiene una excepción como si tiene cinco mil.
Bava declaró que el favoritismo de los del año 13 lo había generado la prensa, y que se equivocaron porque no ganó. No se precisa ser una lumbrera para darse cuenta de lo que quiso decir el golero cuando dijo “la prensa” o “ustedes” refiriéndose a los periodistas deportivos. Obviamente que puede haber excepciones, pero la generalización que hizo es absolutamente pertinente y lógica. Y la forma correcta de refutarla, no es como pretende Sotelo, alegando algunas excepciones o, peor aún, negando la validez del razonamiento inductivo. Él (Sotelo) sabe bien como debería hacerlo, pero sabe que sus argumentos son muy pobres y que no le darían la razón. Por eso prefiere “la forma facilonga” de razonar y se deja llevar por el sentimiento corporativista que anida en su mente.
La prensa dio favorito a Peñarol.
Esta seria una "acusacion cierta".
En realidad Bava acuso a la prensa de "disfrazar las jugadas".
Es opinable si tiene razon o no.
En el clasico, en la jugada del penal parte de la prensa dijo que fue y parte que no.
Como las dos cosas no pueden ocurrir logicamente se podria inferir que lo que dice Bava en parte puede ser cierto.
De ahi a que sea intencional y metodico es otra historia :)
No me parece, puede ser mas un tema de amateurismo de muchos que de intencionalidad
Sin embargo no es la retorica lo que motiva mi comentario… es la repugnante idea de considerarme (a mi y al resto de las personas) como tierra fértil donde se puede “sembrar el perjuicio”.
Al puñado que le presta atención a la información que es “broadcasteada” mediante tecnologías antiguas (la radio la televisión y la prensa escrita) le es indiferente si el medio que transmite la información es suceptible. Porque no deja de ser eso: tan solo un medio, una herramienta que esta en el medio del emisor y el receptor. Bava quizá no lo entienda muy bien, Zaira Nara en cambio si, la opinión publica es una masa difusa, que no se puede amasar. La posibilidad tecnológica de transmitir masivamente un partido de futbol no cambia al juego. Ni la tele ni la radio hacen que el espectáculo cambie… a penas lo difunde. Zaira ninguneo a los medios usando su cuenta twitter para informar… los medios vinieron atrás. Como vienen atrás mostrando lo que las victimas de un terremoto cuelgan en youtube, siempre atrás comentando los twits entre legisladores, y vergonzosamente atrás hablando del video erotico de una boxeadora sin mostrar el contenido, contenido que todo el mundo vio y comento sin necesidad de los medios.
¿Sin los editoriales de Hearst no hubiese habido guerra entre España y USA? ¿Kennedy gano las elecciones por ser mas fotogenico que Nixon en un debate televisivo? ¿Acaso gracias a Murrow la semilla del McCarthismo no floreció?
Quienes son sujetos de la opinión publica jamas gustaron estar sujetos a una opinión desfavorable. Por esa razón Augusto censuro al “Acta Diurna” y eso que aquel milenario diario era editado por el gobierno. Zaira en cambio quiere ser sujeta a la opinión publica, y por eso informa sus romances via twitter. Ni Augusto ni Zaira repararon en el medio, lo que importa es el contenido. El contenido, gracias a la tecnología, pudo ser difundido rápida y masivamente. Por tanto, aquellos que tenían la tecnología (Pulitzer Hearst) tuvieron la chance de decidir que difundir y que no… para entonces la libertad de expresión ya había fecundado y asi tuvimos a Murrow o aprendimos de Welles. Los medios aparecieron, con nombre y todo, y comenzaron a emplear personas para informar hechos. Los periodistas ya existían, pero me animo a decir que los códigos deontológicos de su profesión son relativamente nuevos. Murrow armaba el menú de hechos que iba a transmitir, Welles los inventaba, y como siempre la opinión publica recibia. En aquellos años la posibilidad de difundir masivamente estaba en manos de pocos, y quizá por esa razón exista la sensación que esos pocos eran poderosos. Quizas lo eran, pero la tecnología los relego. No se cuantos seguidores tendrá Zaira, pero muy probablemente sean más que los lectores que compran diarios, o quienes tienen la radio prendida mientras cocinan la cena… y todos estos seguramente se enteraron de sus amoríos antes de escucharlos o leerlos. Herederos de la época del oligopolio del broadcasting, muchos medios creen que el publico esta atento a si fueron ellos o la vecina el primero en informar… por primerear no se dan cuenta que el verdadero valor de su trabajo esta en opinar.
Y lo que importa no es la opinión, lo que importa es que la opinión sea libre.
Cuando Lorenzo grito “fotos no” no quería que los uruguayos supiéramos que estaba almorzando con LM, para el y para nosotros que haya sido publicada por El Observador es anecdotico. Se enojo porque le sacaron la foto, no porque fue publicada por un diario. Esa foto genera opinión, el medio que la difunde no.
La opinión no es permeable a la decisión de los editores, ni de militares golpistas ni de botineras desairadas… a la larga Ud, como Augusto y Zaira, tiene razón: Los medios y los periodistas no existen
La verdad es que sinceramente Ud. me agrada como periodista, sigo sus notas con atención y me parece un periodista a tener en cuenta, pero respuestas con ironías que rozan la falta de respeto decepcionan un poco.
Ud. no entendió la nota de Inzaurralde. Es bien sencillo cómo un periodista puede herir con un mal titular, cómo puede írsele de las manos la situación y cuan cuidadoso se debe ser con lo que se dice.
En 1989 o 1990 el Chuecho Perdomo le encajó un zapatazo a Shilton en Wembley. El arquero era una leyenda en el fútbol inglés, pero estaba veterano. Un diario inglés (amarillista por cierto) no tuvo mejor idea que titular "Stupid Shilton". En aquel entonces nos parecía una falta de respeto titular así y nos asombraba.
Ahora nos estamos acostumbrando a tener prensa así. Y parece que no se la puede criticar. Es lo que hay.