Acuerdo Grande

Acuerdo Grande

Por una coalición opositora


LA COALICIÓN SE HACE ASÍ por Miguel Manzi

15.May.2013

La coalición renovadora por Montevideo va, sale, no tiene marcha atrás: blancos, colorados, e independientes (no orgánicos…) tendrán una opción real de disputarle el gobierno capitalino a la coalición oficialista que hará 25 años que (mal) gobierna el Departamento. Así lo acordaron las amplísimas mayorías dirigentes de ambos partidos fundacionales, pero así lo quieren también las amplísimas mayorías ciudadanas no frenteamplistas, como lo evidenció con ilevantable elocuencia la última encuesta que dio a conocer CIFRA el pasado 6 de mayo. Véase: en intención de voto para las Departamentales estamos en el horno, con papas y boniatos: FA 36%, PN 15%, PC 9%, PI 2%, Indecisos 38%. Pero resulta que el 46% de los encuestados está dispuesto a votar en el marco de un acuerdo entre el Partido Colorado y el Partido Nacional. Entiéndase bien: blancos y colorados, colorados y blancos, separados llegamos al 24%, pero juntos al 46%; la coalición resulta en casi el doble que la suma de las partes. Y todavía hay más: el 88% de los colorados y el 84% de los blancos está a favor de la coalición. Adviértase la enormidad: ¡¡la gente está dispuesta a votar una cosa que todavía no existe!! (si estarán hartos de lo que hay). La abrumadora mayoría de los votantes blancos y colorados y la mayoría abrumadora del electorado independiente está a favor de la coalición, como lo está la amplísima mayoría de la dirigencia partidaria. No hay dónde perderse; sólo hay que hacerlo. Y para eso es necesario desarrollar, por un lado, actividades internas de los partidos coaligados, y por otro, actividades propias de la coalición, hasta poner en pie “Alternativa Montevideo”, que así la llamó Larrañaga, y por mí es tema resuelto.

 

Los partidos tendrán que: (i) pasar el acuerdo por sus órganos estatutarios, en el caso de los colorados, la Convención Nacional; (ii) montar los espacios internos para la discusión programática; y (iii) resolver oportunamente la nominación de sus candidatos al lema común. A su turno, la coalición deberá procesar (i) asuntos formales/electorales, y (ii) asuntos sustanciales/programáticos.

 

La clave electoral de la coalición, huelga decirlo, es la acumulación de los votos de una candidatura blanca y una candidatura colorada a la Intendencia de Montevideo. Para acumular votos, es necesario presentarse bajo un mismo “lema” o “partido” (sinónimos en la legislación electoral). Y para hacer tal cosa, caben dos posibilidades: o votamos bajo un lema ya registrado (v.gr., “Partido Nacional” o “Partido Colorado”, tras que el entusiasmo de Lacalle Pou dejara en evidencia que el lema “Unión Cívica” no tiene registro vigente), o registramos un nuevo lema, que es lo que haremos: registrar un nuevo lema común, que se llamaría “Alternativa Montevideo”. Una cohorte de agoreros salió en estos días a pronosticar que las exigencias para registrar el nuevo lema eran poco menos que de imposible cumplimiento. Nada de eso, y al contrario. Si nadie se pone talibán, los papelitos son lo de menos; nos vamos por la línea de mínima para cumplir con las formalidades, y afuera; ya habrá tiempo de escribir para la historia; ahora estamos haciendo historia, que es tarea más urgente. Para registrar un nuevo lema, la legislación electoral exige los siguientes requisitos, que voy glosando:

 

(1) PRESENTAR ACTA DE FUNDACIÓN, CON EL NOMBRE DEL PARTIDO, ESTATUTO Y NÓMINA DE SUS AUTORIDADES PROVISORIAS. En Montevideo, el día tal y cual, nos constituimos para ganar la Intendencia bajo el lema “Alternativa Montevideo”, y vamo’arriba. Autoridades provisorias: imagino un prócer colorado (¡¡Carlos Maggi!!) y un prócer blanco, afectos a la idea e insospechables de ambiciones personales.

 

(2) PRESENTAR LA FIRMA DEL 0,5 ‰ (CINCO POR MIL) DEL TOTAL DE CIUDADANOS HABILITADOS PARA VOTAR EN LA ÚLTIMA ELECCIÓN NACIONAL. Son 13.000 firmas. No se amontonen para firmar, que 13.000 es el mínimo, pero podemos presentar todas las que queramos.

 

(3) PRESENTAR UNA CARTA DE PRINCIPIOS. Somos todos demócratas, republicanos y liberales, estamos a favor del bien y en contra del mal, queremos un Montevideo para todos (y todas…) y listo. ¡¡Línea de mínima!!

 

Estos papelitos tienen que presentarse en la Corte Electoral 150 días antes de las elecciones internas, que son el 1º de junio de 2014, lo que daría el 1º de enero de 2014. Pero como no queremos correr riesgos absurdos en asunto de tamaña importancia, podríamos proponernos presentar los papelitos, digamos, el 1º de noviembre próximo. Después, el nuevo lema así registrado tiene que “perfeccionarse”, cumpliendo estos dos requisitos adicionales:

 

(4) PRESENTARSE A LAS ELECCIONES INTERNAS DE JUNIO 2014 CON UN CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA Y 500 CANDIDATOS A CONVENCIONALES. Tiramos una monedita al aire y vemos si de presidente va Don Carlos o el prócer nacionalista, y ponemos no 500 sino 600 candidatos a convencionales (300 pondrán los blancos y 300 pondremos los colorados), que serán cónyuges, hijos, nietos, hermanos, sobrinos, cuñados, suegros y cualquier otro pariente o amigo próximo, querido, y confiable. Ocurre que este selecto grupo de ciudadanos será la autoridad máxima del lema común, por ello pasará a la historia, pero actuará por delegación de los partidos coaligados. Digo: no se la vayan a creer, y en lugar de proclamar a los candidatos nominados por las convenciones blanca y colorada, se les ocurra proclamar a Darwin Desbocatti (¡¡yo lo voto!!...).

 

(5) OBTENER 500 VOTOS.  Entiéndase bien: esta comparecencia del nuevo lema común “Alternativa Montevideo” en las internas, es una formalidad para perfeccionar el registro del lema y poder presentar candidatos a las departamentales. No se trata de una elección competitiva, sino de una comparecencia pactada: 300 gurkas colorados y 300 gurkas blancos, los mismos que figuran como convencionales, van y votan la lista única de “Alternativa Montevideo”,  integrada por ellos mismos.

 

Tras las internas, el nuevo partido queda quietito como recién operado, a la espera de la nominación del candidato  blanco y del candidato colorado (de estos temas hablamos otro día). Sencillito, clarito, no hay dónde perderse. ¡¡RESIGNADOS LAS LARAILAS!! (término poco académico, pero de musicalidad y elocuencia indiscutibles). En cinco pasos “fáciles y de ingenio”, montamos la plataforma electoral que hará posible desalojar al Frente Amplio del gobierno departamental, tras 25 años de incontestado monopolio. Si esto es de resignados, agarrate fuerte cuando nos entusiasmemos…

 

LOS ASUNTOS SUSTANCIALES/PROGRAMÁTICOS

 

Los agoreros también dicen que la coalición no tiene un programa, sino que es sólo un recurso electoral en contra del F.A. Y por supuesto que la coalición todavía no tiene programa: antes tiene que haber coalición… Tan cierto como lo anterior es que cada partido individualmente tiene sus ideas y sus propuestas para Montevideo. Ahora tenemos que ponernos de acuerdo en cuáles, del elenco de uno y otro, serán las propuestas comunes. Y también en esto, yo creo que tenemos que ir por la línea de mínima, pero muy sólida. Digo, por ejemplo: definir las cinco áreas prioritarias para el próximo quinquenio, y desarrollarlas al mayor detalle, con formato de programas y proyectos viabilizados, apartándonos de la retórica habitual que se ofrece en los programas de campaña, llenos de “hay que hacer tal cosa”, “nos comprometemos a tal otra”, ideas generales, expresiones de deseos, todas muy creativas, pero escasamente fundadas, mucho menos viabilizadas, y ni por asomo costeadas… (los programas de todos los partidos, presentados en las departamentales de 2010, se pueden ver en http://www.corteelectoral.gub.uy/gxpsites/hgxpp001.aspx?1,26,365,O,S,0,,).

 

¿Se pueden acordar áreas de gestión sin coincidir antes, en detalle y en profundidad, en un marco general-ideológico? Por supuesto que se puede, al menos en Montevideo, donde nos enfrentamos a un “gobierno fallido” que está incumpliendo las tareas básicas, elementales, que han de hacerse y hacerse bien bajo cualquier marco general-ideológico (v.gr., ayer salió en los diarios que la IM iba a introducir contenedores “inviolables”, como los hay en La Rioja -tardaron 25 años en darse cuenta de que algo estaba mal con la basura; y estimo que nadie saldrá a decir que los actuales, con tapa arriba, son progresistas, y los nuevos, con tapa abajo,  son neoliberales, porque atentan contra el medio de vida de 10.000 clasificadores; ¿o sí?).

 

La coalición sacude el panorama político montevideano en general, y el interior de todos los partidos en particular. Se vienen tiempos fermentales, de discusión, de lucha de ideas, de acuerdos y desacuerdos, de renovación, de cambio. Y con eso ya ganamos, ganamos todos.