Si bien conocía que estaba peleando contra una enfermedad injusta y cruel, nos venía acostumbrado a ese estado: luchando
La muerte temprana de su padre lo marcó. Lo marcó no solo desde el afecto sino que condicionó su vida en la defensa de las libertades. Dorbal, su papá, murió a consecuencia de la pérdida de éstas.
Claudio pertenece a la generación pos dictadura, de los jóvenes formados en las convicciones, las ideas y la lucha por la democracia.
Periodista nato, riguroso, obsesivo y tozudo en el ejercicio de la profesión. Honesto, íntegro. Periodista, siempre.
Nos conocíamos desde siempre, familiarmente antes personalmente luego. La pasión defensorista nos llevó a coincidir en la directiva del Club. Sus aportes, también allí, fueron de destaque. Separó con justeza la pasión del hincha de la responsabilidad directriz.
Su ascendente carrera lo llevó a distintas responsabilidades. Trascendió la frontera uruguaya desde su labor en la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP). Presidió la Comisión de Libertad de Prensa e Información, como siempre, en la más férrea lucha en defensa de la libertad.
La trayectoria de Claudio, marcó un estilo de profesionalidad a imitar. En su profesión hizo todo, buscó la noticia, escribió, dirigió, instruyó. Todo
En una sociedad que asiste cuasi indiferente a la pérdida de nuestros más ricos valores, donde lo inmediato y volátil se impone a lo importante y profundo, Claudio es necesario. Sí señor
Inmerso ya en lo desconocido pretendo que esa lucha lo reconforte en la paz de haber honrado sus convicciones.
Termino estas líneas con estas palabras de Miguel de Cervantes a quien valoró la libertad por sobre toda condición.
La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida.
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